Gobierno procura sensibilizar a niños y jóvenes sobre importancia de una buena alimentación
En el marco de la Ley de Alimentación Saludable en Centros Educativos, el Ministerio de Salud Pública y el de Educación y Cultura, la Administración Nacional de Educación Pública y la Secretaría Nacional del Deporte buscan sensibilizar a niños y jóvenes. La subsecretaria de Salud, Cristina Lustemberg, insistió en los perjuicios que generan las malas prácticas alimenticias y su incidencia en la adultez.
“No se mejora el cumplimiento de la ley si la población no se empodera de las situaciones que hacen a su alimentación y a la actividad física”, sostuvo la subsecretaria de Salud Pública, durante una actividad denominada “Prontos, listos, ya” sobre la práctica de una alimentación saludable, el 29 de julio. La iniciativa se enmarca en la Ley de Alimentación Saludable en Centros Educativos.
Junto a la subsecretaria, participaron referentes del Ministerio de Educación y Cultura, la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y la Secretaría Nacional del Deporte.
El objetivo era reflexionar sobre el consumo de alimentos y promover la actividad física para evitar el aumento excesivo de peso. De esa forma, se contribuye al alcance de los Objetivos Sanitarios Nacionales planteados por el Ministerio de Salud para el quinquenio 2015-2020. Al respecto, Lustemberg recordó que “Uruguay construyó objetivos sanitarios en los que se destaca el trabajo intersectorial” y dijo que “la salud no se entiende sin la participación y el trabajo sobre los determinantes sanitarios”.
Entre las acciones previstas se procuran intervenciones en establecimientos escolares y liceales, públicos y privados. Estas actividades incluyen reflexión sobre riesgos ocasionados por el sobrepeso y la obesidad, así como la incidencia de malos hábitos alimenticios en las enfermedades crónicas no transmisibles.
Según informa el ministerio, niños, jóvenes y adultos consumen una dieta de baja calidad y tienen un bajo nivel de actividad física. La dieta de los niños es escasa en frutas, verduras y pescado, y excesiva en golosinas y bebidas azucaradas, en tanto el consumo de comida rápida registra uno de los crecimientos más altos de la región. Además, el consumo de frutas y verduras solo alcanza a las cinco porciones diarias en el 9 % de la población, mientras que solo el 28,8 % de los adolescentes realiza actividad física con la frecuencia adecuada.
En los últimos años se constató un incremento de los niveles de sobrepeso y de obesidad, que ubica a Uruguay entre uno de los países con mayor prevalencia en el mundo.
“Salir al encuentro de niños, niñas y adolescentes resulta vital para revertir esta tendencia. Es fundamental el trabajo en conjunto con el sistema educativo, lo que nos permite llegar a los estudiantes desde su cotidianeidad”, concluyó Lustemberg.
Fuente: Presidencia de la República